Una de las zonas más comerciales de Ate está conformada por el triángulo Carretera Central-prolongación Javier Prado-avenidad Metropolitana. La marca del emprendimiento y su sostenimiento se visibiliza en tiendas, centros de salud, casas de cambio y entidades bancarias. En medio de ese escenario, como ocurre en otros distritos periféricos de Lima, el comercio ambulatorio lucha por mantenerse vigente.
Desde marzo de este año, fecha en que se dio su último desalojo, el comercio informal ha pretendido afianzarse en un espacio que ya consideran propio. No importa si su presencia altera el tránsito vehicular o contribuye al aumento de la basura y los asaltos del sector. La municipalidad, a juzgar por sus ciudadanos, decidió desentenderse de imponer el orden.
Los vecinos del sector aseguran que ambulantes realizan pagos diarios a ciertos dueños de casa por el espacio que ocupan en la calle al frente de su propiedad.
Créditos: Katherine Salcedo, Xenia Martínez, Alexis Segura
Foto: Katherine Salcedo