jueves, 19 junio 2025
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[CLUB DE JÓVENES CRÍTICOS] Elegancia y tradición de un viejo Son

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Los ojos fijos y prominentes, el cabello recogido no deja escapar ningun pelo rebelde. Podrías verla y sorprenderte que aquella finura no se ha ido fugazmente. Está sentada en primera fila. Mira atenta cada canción de la Orquesta Sinfónica Nacional del Perú y el Coro Nacional del Perú. Cada vez que acaba la pieza musical, aplaude, como si no fuera consciente de su creación. Alicia Maguiña, compositora peruana, se rememora en el Gran Teatro Nacional.

El Ministerio de Cultura y el Proyecto Especial Bicentenario realizan Mujeres del Bicentenario para conmemorar la trayectoria musical de artistas como Alicia Maguiña, compositora, investigadora de la música de la Costa y Sierra del Perú, a cargo del curador Marino Martínez y el coordinador artístico Javier Súnico.

Memorias de una época gloriosa

Entre las piezas se encontraba el vals “Inocente amor”, que fue su primera composición a los 16 años. Así como, la marinera Jarana para llorar riendo”, quien en este campo Alicia Maguiña lo investigó y también se dedicó a enseñar a danzarlo. Esta pieza fue acompañado por calurosas palmas.

Alicia escuchaba con el alma cada problema del Perú y lo esbozaba en valses, marineras y tonderos. Entendía el problema del indio, las distintas formas de marginación y lo hacia canción, como  “Indio” que repercutió en la Lima de antaño, que esta vez no sonó en cantinas y calles polvorientas, sino en el bello escenario del Gran Teatro Nacional.

“La luz se hizo sombra

y nació el indio,

La puna se hizo hombre

y nació el indio.”

Revalorar, escuchar y sentir

Hay diversas formas de querer el Perú y escuchar a Alicia Maguiña es una manera de hacerlo. Pues es respetar su trascendencia y  distinguido estilo musical que se impuso en una época donde los hombres eran mayoría  en la escena local. Es luchar con prejuicios al cantar “Negra quiero ser”, en un periodo donde las habladurías eran más fuertes que el sonido del palpitar del corazón, pero nunca para ella.

Al finalizar el concierto el maestro Fernando Valcárcel agradeció a Alicia Maguiña, quien le devolvió el gesto y repitió algunas piezas musicales para el deleite del público. Los espectadores se acercaron a agradecer la bella velada, o tal vez solo mirarla y tenerla en frente y agradecerle de que esa música sea parte de su vida, existen diferentes ideas. Lo que sabe es que Alicia Maguiña sigue viva en marineras, tonderos y en ritmos de un elegante y viejo son. 

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Escrito por Maricielo Pérez Llerena: maricielo.perez1@unmsm.edu.pe
Fotografía de Diana Ortiz Chuquín: diana.ortiz@unmsm.edu.pe

@MediaLabUNMSM

Lima, 03 de octubre de 2019

El Club de Jóvenes Críticos es un programa que trabaja en conjunto el enfoque de Educación del Área de Públicos y @MediaLabUNMSM. Estudiantes de Comunicación Social se entrenan en la crítica de artes escénicas a partir de la investigación, observación de procesos creativos y entrevistas con artistas y elencos que se presentan en el @Gran Teatro Nacional.

Paisajes sonoros. Redescubriendo los paísajes urbanos

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https://soundcloud.com/medialabunmsm/paisajes-sonoros-redescubriendo-los-espacios-urbanos
«Paisajes Sonoros. redescubriendo los espacios urbanos» con Alejandro Brianza

[Radio] Desafíos para la radio local peruana

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La radio es una manifestación clara del ingreso del Perú a la modernidad.

Por: Jacqueline Oyarce Cruz

La radiodifusión local, espacio de participación y recreación de la cultura popular desde sus orígenes, se está convirtiendo paulatinamente en difusora de contenidos que no reflejan la realidad, ni los saberes del lugar donde funcionan. Se produce una sustitución del discurso local por uno producido en “estudio” que transmite a los pueblos del país el discurso de un supuesto “saber”.

Esta sección de MediaLab aborda diferentes estudios sobre radiodifusión en el Perú. Esta entrega trata sobre las radios de frontera y específicamente de las emisoras locales de Tumbes que experimentan el peligro de desaparecer.

Un poco de historia sobre la radio

La población peruana accede a este medio de comunicación solo desde el momento en que se generaliza el uso de la energía eléctrica, tiempo después los transistores hacen posible la masificación de su sintonía. Desde su nacimiento en 1925 evoluciona a la par de la sociedad.

En la radio la tradición oral, la variedad lingüística y la disímil geografía nacional encuentran múltiples posibilidades de reproducción y alcance. Aunque su desarrollo no es homogéneo se puede identificar constantes: el discurso, la propiedad, el acceso a la radio y su relación con el grupo social ligado al poder económico; su instrumentalización para el fortalecimiento de la identidad y cultura de los pueblos y su conformación en entidades corporativas mediáticas.

Nuevos desafíos para la radio local peruana del siglo XXI. El caso de Radio Tumbes

Esta investigación, de carácter exploratorio, revisa el desarrollo radial local en contexto. Tiene como objetivo determinar las razones por las cuales las emisoras locales de provincias experimentan el peligro de desaparecer del dial. Se estudia el caso de una emisora de frontera, Radio Tumbes. La hipótesis es que las corporaciones operan bajo mecanismos que debilitan la programación local.

Creemos que es necesario y fundamental desarrollar más espacios de reflexión sobre este tema en las universidades, que es donde se forman los profesionales que luego se harán cargo del trabajo radial; también hacemos hincapié en la necesidad de revisar la historia y de establecer mayores espacios de divulgación para que los pueblos conozcan y se reconozcan en su pasado, en su memoria viva y presente ya que de acuerdo a W. Benjamín no todo el pasado se realiza en el pasado.

Y sobre todo en los pueblos de frontera, que es donde se inicia la “peruanidad”, lugares que debieran ser punto de emulación, de exhibición de lo propio de cada país, una especie de salón de visita y respeto para el otro que llega, para el país que comienza al otro lado. Ojalá que esto se dé como modo de recuperar los saberes propios, de dinamizar y fortalecer la cultura local, y como ejemplo de convivencia al mismo tiempo que de una pacífica competencia de valores entre países.

Por: Jacqueline Oyarce Cruz ORCID/ Email /GoogleScholar

  • Este artículo fue publicado en Comuni@cción: Revista De Investigación En Comunicación Y Desarrollo, 3(2), 12-22. El artículo completo se puede leer haciendo click aqui.

Lima, diciembre de 2019

[CLUB DE JÓVENES CRÍTICOS] Siderales: el caótico orden de nuestra existencia

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Desde tiempos inmemorables el hombre se ha cuestionado a sí mismo y lo que ocurre a su alrededor, y ha sentido la necesidad de identificarse con algún tipo de representación. Partiendo de estas premisas, Mark Godden crea y nos presenta dos de sus grandes obras de ballet: «Ángeles en la Arquitectura» y «Siderales». Mientras la primera obra cuenta con reconocimientos desde el año 2015, la segunda es un estreno a nivel mundial que busca darle a nuestro país un espacio en la danza internacional.

Afuera del escenario

Poco a poco caía la noche y las personas se apresuraban en comprar y recoger sus entradas en los exteriores bulliciosos del Gran Teatro Nacional (GTN). El interior brindaba un ambiente más tranquilo, especialmente la sala del teatro, que se consumía en un silencio abrumador. La espera se expresaba a través de este silencio, que gritaba y exigía el inicio del espectáculo, hasta que la “tercera llamada” dio pie a elevar el inmenso telón azul. 

Ángeles en la Arquitectura

El espectáculo comienza con Ángeles en la Arquitectura que está inspirada en la belleza espiritual de los “Shakers”, secta norteamericana fundada a mediados del siglo XVIII. Ellos creían que debían llevar una vida lo más cercana posible a la divinidad, por ello se regían bajo un lema: “las manos para trabajar y los corazones para Dios”

Este intento de perfección los llevó a realizar un trabajo delicado y cuidadoso que se reflejó en su mueblería: escobas, pecheras, sillas artesanales. Buscaban un balance y simetría en sus objetos, característica que se torna constante en esta obra. Desde el momento inicial se muestran seis escobas -separadas a una misma distancia- colgadas en la pared frontal hacia el público y ocho sillas -cuatro en cada extremo- posicionadas al revés -referente al suelo- y pegadas a la parte más alta del escenario.

Así como los elementos están muy bien posicionados, los movimientos de los artistas también. La postura de sus extremidades buscan la simetría consigo mismo y con su alrededor. En otras palabras, mientras los Shakers pretendían alcanzar la perfección con el trabajo de su mueblería, los artistas de esta noche lo hacen a través de su danza, que se tornó -como estas líneas- emocionante para unos e incomprensible para otros.

Pero ambos tipos de espectadores lo disfrutaban -cada uno a su modo- y no podían desprender su mirada del escenario. De alguna u otra manera se había forjado una fuerte conexión espiritual, no con Dios ni con los shakers, sino con el protagonista más importante del espectáculo: el público.

Por otro lado, si bien se destaca el manejo de los elementos y el buen desenvolvimiento de los artistas en escena, por momentos se notaron ciertas descoordinaciones entre ellos, lo que confrontó al trabajo simétrico y perfeccionista de la secta norteamericana: una armonía de contrastes propia de Godden.

Siderales

Después del intermedio seguía el turno de Siderales, la obra más esperada por todo el público. Esto no era sorpresa alguna, ya que íbamos a presenciar un estreno a nivel mundial. Por otro lado, la obra iba a presentar un tema con el que absolutamente todos -consciente o inconscientemente- estamos relacionados: nuestra existencia.

Desde el más mínimo movimiento de cada músculo hasta el más pequeño detalle de cada fotograma causó conmoción e hizo vibrar a los espectadores. La conexión lograda por la obra antecesora no se perdió, pero sí tuvo un cambio radical. Es decir, ahora el centro de atención no era la divinidad y perfección, sino todo lo contrario: el hombre.

Como se mencionó, el ser humano se cuestiona por naturaleza. Siderales apela a ello y nos brinda una nueva reflexión sobre el origen de la existencia humana. Por ello, fusiona la escenografía y los cuerpos, y los vuelve uno solo, logrando aflorar un sentimiento inexplicable en estas líneas, pero comprendido en ese preciso momento.

Godden nos regala momentos caóticamente ordenados y nos propone encontrarnos fuera de nosotros mismos. Para ello, este proceso parte desde lo más macro -el universo- hasta llegar de a pocos al ser humano y su existencia, repitiendo el ciclo infinitamente.

Por otro lado, no existe una definición establecida de estas obras, es decir, el público es libre de interpretar y sentir lo que mejor se adapte a su persona. Si te causa nostalgia, llora. Si te causa alegría, ríe. Todo es válido en esta noche y todo es posible en estos días.

Terminado el espectáculo, el público se levantó de sus asientos y recibió con aplausos a todo el elenco participante. Cada golpe entre las palmas era un agradecimiento a cada artista que, estando o no en escena, nos demostró que el universo y el hombre no están tan distantes como parece, al contrario, están completamente relacionados. Así que, mientras la infinitud del universo es la finitud del hombre, el orden del universo forma el caos de nuestra existencia.

Texto de Ronald Cueva: ronald.cueva1@unmsm.edu.pe
Fotografía de Johana Perleche: johana.perleche@unmsm.edu.pe

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Lima, 27 de setiembre de 2019

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(CLUB DE JÓVENES CRÍTICOS) Ballet filosófico dual: orden y caos

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No es la primera vez que Mark Godden nos hace estallar la cabeza con ideas que alteran nuestra existencia (y que la componen también), el orden y el caos son premisas en sus creaciones, así como lo abstracto lo fue en Miroirs. El reconocido coreógrafo norteamericano junto al Ballet Nacional del Perú presentan Siderales, segunda temporada 2019 de ballet, con dos obras: la famosa Ángeles en la Arquitectura  y el estreno mundial de Siderales.

El significado de la perfección  y lo espiritual

El año 2018, cuando se celebró la temporada de coreógrafos internacionales, el público recordó el ballet neoclásico con Angels in the Architecture, creación del famoso coreógrafo estadounidense Mark Godden, obra que había estado en el escenario limeño, también, en el 2015. Gracias a la cercanía colaborativa con el Ballet Nacional, Godden nos presenta por tercera vez una de sus obras emblemáticas, un arte que ve en la inspiración religiosa la forma de representar un estilo de vida. 

Pero, ¿qué es el servicio espiritual hacia Dios? y ¿cómo el ballet puede representarlo?

 Angels in the Architecture es un ballet que no muestra  una historia. No es necesaria en esta ocasión, pues es diferente a Siderales, ¿por qué?, se preguntará… no desespere que un momento lo sabrá. 

Lo que resalta en Angels in the Architecture es la forma del movimiento corporal y lo que se da a entender con estos movimientos. Mark Godden explica que no busca recrear el estilo de vida de los Shakers, comunidad religiosa que inspira al ballet por su exquisita perfección en toda actividad humana, sino cómo el movimiento de los cuerpos explora en la conexión espiritual entre lo divino y el trabajo. 

Esta espiritualidad a la que hacemos referencia proviene de su amor por el orden y la perfección divina. Es así que elementos como la escoba y la silla en la danza son una muestra de aquella rigurosidad en el espacio, pues ambas se presentan verticales y simétricas. Entonces, las proyecciones que realizan los bailarines con sus movimientos, es decir, su presentación personal, muestran las expresiones individuales de fe y que en conjunto se vuelven un acto de seguimiento de reglas, de un orden, de lo divino, de lo puro.

Sin embargo, creer que solo aquello es Angels in the Architecture es caer en un error. La danza, el alma del ballet, se disfruta también con las composiciones musicales de Aaron Copland, en especial Appalachian Spring , en la que se encuentra el famoso himno de los Shakers: Tis a gift to be simple. 

El elenco de Ballet Nacional demostró su nivel artístico internacional. Resaltaron los movimientos en solitario y los dúos en la primera presentación por su carácter espiritual y elegante. En siderales, la obra esperada y la novedad de la segunda temporada 2019 pues es de estreno mundial, el aspecto técnico y de estilo del  ballet refleja un reto para el reparto. 

Cada cuerpo es una posibilidad de contraposición. La idea de lo caótico presentada en cuadros grupales son tensiones y distensiones volumétricas que representan una tercera dimensión en forma de círculos: el grupo de bailarines forman esta figura y la amplían, la extienden para luego estrecharlas y comprimirlas, paso que finalmente permite la explosión, el génesis.

Este génesis es la historia de Siderales, la constante búsqueda del yo, de la existencia humana, el rol que cumplimos en este universo, y el rol que cumple el universo. Lo filosófico y abstracto convergen en esta presentación, de un poco más de 40 minutos de duración, los cuerpos inician el viaje, el nacimiento que se avizora con una presentación digital de un cuerpo flotante, inerte en un inicio, pero que luego, al volverse de color, refleja la irrevocable situación en la que se encuentra el hombre desde sus primeros días: solo. 

El cosmos es el caos y el orden

 El destino incierto del hombre, es el sentido incierto del universo, del que mucho o poco sabemos gracias a la ciencia. En el arte del ballet, generar la sensación de una alteración del tiempo- espacio- movimiento es transportar al público a una atmósfera de caos. Justo lo que Siderales busca.

Este dinamismo atemporal consiste en la velocidad y lentitud de la danza. Este logro de explosión de las emociones se da por la reinterpretación de las Cuatro Estaciones de Antonio Vivaldi realizada por Max Ritcher, que permite emanar un viaje sonoro y corporal. A través de movimientos de lentitud larga a cargo del cuerpo coreográfico se presenta la similitud de las constelaciones con la danza, de estrellas que surgen en pantallas LED, gracias a la tecnología y que luego se convierten en un prestissimo cuando los desplazamientos en el escenario se bifurcan y brazos y manos conducen a un orden en el caos.

Lo decíamos al inicio, Siderales es una historia del cosmos hecha ballet. En la que las coreografías grupales finales de angustia y atracción conducen a los cuerpos a un orden, a un ciclo de recomposición, unión y luego la nada. Y pese a que, en partes de la danza,  no todos presentaron el mismo nivel de destreza y precisión, el final de la presentación con Rina Barrantes y Ariam León en el centro del cuerpo de baile, reflejó el poder e impacto de lo que significa Siderales:  la reflexión de la realidad y de la existencia humana.

Texto de Elizabeth Condori: elizabeth.condori@unmsm.edu.pe

Fotografía de Johanna Perleche: johanna.perleche@unmsm.edu.pe 

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Lima, 26 de setiembre de 2019

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[LIBROS FAVORITOS] “Filosofía y Sociedad” de Mario Bunge

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Por: Carlos Gonzales Garcia.

Mario Bunge cumple 100 años. Físico teórico y filósofo “cientista”, Bunge es autor de una importante y voluminosa producción en los campos de la Metodología, la Epistemología y la Teoría de la Ciencia, pero también destaca por sus obras sobre física, filosofía política y ética ligada a la ciencia y al desarrollo de la humanidad.

En el estudio de las Ciencias Sociales, que es el área que me interesa, Bunge entrelaza la investigación sociológica con las teorías filosóficas. En otras palabras, nos dice que no hay un límite exacto que separe ambos campos, de tal forma que los científicos sociales y filósofos pueden servirse mutuamente para perfeccionar sus estrategias de investigación, analizar conceptos claves, dar origen a sistemas coherentes y realistas e identificar problemas nuevos y relevantes.

Precisamente una de las obras que reúne una serie de trabajos sobre diversos problemas filosóficos que engendran las ciencias sociales es Filosofía y Sociedad (2008). En este libro escrito con claridad y hasta con sentido del humor, Bunge, desde la sociología matemática, trata problemas que nos interesan como humanidad y que van desde el agotamiento de los recursos naturales, la desigualdad económica, la delincuencia, la ambivalencia de la técnica informática y el internet, hasta la filosofía del management, a fin de promover estrategias que, en el mejor de los casos, puedan ser eficaces.

Enfoque

En Filosofía y Sociedad, Bunge insiste en su defensa del enfoque sistémico matemático, donde lo social lo describe como un sistema compuesto por subsistemas (económico, político, cultural) cuyos componentes interactúan entre sí.

La concepción sistémica consiste en suponer que los objetos en cuestión, lejos de ser simples o de estar aislados, son sistemas o partes de sistemas. A su vez, un sistema es un objeto complejo que tiene propiedades globales y se comporta como un todo debido a que sus componentes están unidos entre sí (p. 9).

Es así como todo sistema se caracteriza por poseer una composición (conjunto de partes), un entorno (conjunto de objetos con los que está relacionado), una estructura (conjunto de vínculos entre las partes y entre estas y aquellos componentes de su entorno que lo afectan o que son afectados por el sistema). Sin embargo, a diferencia de los sistemas conceptuales (clasificaciones y teorías) y semióticos (textos y partituras musicales) que son estáticos, todos lo demás (físicos, químicos, biológicos, sociales, técnicos) cambian. Es por eso que estos sistemas cuentan con una cuarta característica más: “el mecanismo peculiar que mantiene o transforma al sistema” (p. 11).

La información, ¿motor de la sociedad?

Con excepción del sistema semiótico, los flujos de información (o comunicación) no son propiamente mecanismos, pues solo forman parte de las relaciones sociales. Existen otros tipos de relaciones en lo social como son los subsistemas biológicos, económicos y políticos cuyos mecanismos son el trabajo, la competencia, el aprendizaje, la competencia, la persuasión y la coerción, pues más que información, necesitan de conocimientos y prácticas creados por la ciencia y la técnica.

Vivir en sociedad es actuar con ayuda de información. Pero la mera información no conduce a la acción: lo que puede detonar una acción es el conocimiento. Y no basta disponer de información para conocer. […] Lo que caracteriza al trabajo calificado, la cooperación, la competencia y la coerción organizada es el conocimiento especializado, es decir, el que va más allá del conocimiento ordinario. Es claro que este conocimiento, como cualquier otro, se transmite vía de la información. Pero la información en sí misma no es conocimiento (p. 97).

Problemas globales, ciencia y ética

De acuerdo con Bunge, problemas sociales como el calentamiento global, el consumo excesivo de recursos naturales, las brechas económicas, entre otros, necesitan abordarse, más que con voluntad política, con la ayuda de los conocimientos proporcionados tanto por las ciencias y técnicas sociales, así como por la ética o normas de conducta.

En particular, necesitamos saber quiénes necesitan qué, cómo se satisfacen tales necesidades, y qué deberes tenemos con los necesitados. Por ejemplo, regalar comida al hambriento puede resolver una emergencia, pero es contraproductivo a la larga porque arruina a los agricultores locales, cuyos productos no pueden competir con alimentos que caen del cielo. […] Tampoco basta el conocimiento experto: también falta algo de moral. Esto se debe a que, cada vez que actuamos sobre otros, los afectamos, y las reglas básicas que regulan la coexistencia humana son principios morales, tales como el de reciprocidad y el de ayudar al necesitado aun si no se puede esperar recompensa (p. 25).

Delito y sociedad

Para Bunge, todo delito conocido por la sociedad como fraude, traición, robo, asesinato si bien es perjudicial es acaso el menos entendido de las “conductas torcidas” pues se maneja bajo la consigna de “castigar antes que prevenir” en vez de intentar conocer sus causas con el objetivo de “rediseñar políticas sociales”.

Esta actitud retributiva, enraizada en el deseo primitivo de venganza, bloquea tanto la búsqueda de los mecanismos del delito como el diseño de programas eficaces de prevención y rehabilitación. Más aun, hace del delito un tema exclusivo de la psicología, el derecho, la moral y la religión, aislando así a la criminología de las ciencias y las técnicas sociales en lugar de ubicarlo en medios de ellas (p. 49).

Así, hay ciencias sociales como “la antropología, la psicología social, la sociología y la historiografía (que) nos enseñan varias lecciones importantes sobre el delito. Una de ellas es que hay muchos tipos de delito […] hay crímenes ambientales; delitos políticos y crímenes culturales” (p. 49).

Management y filosofía

Este apartado es la deliciosa conversación que sostiene Bunge en el papel de entrevistador con Henry Mintzberg, un reputado experto en temas de administración de empresas y académico de McGill University, de Canadá.

Reproduzco algunas partes de la conversación que les podría interesar:

M. B. ¿Qué es para ti el management: ciencia, arte o técnica?

H. M. La ciencia busca la verdad. El management busca resultados. Por lo tanto el management no es una ciencia. Tampoco es una ciencia aplicada (la que es ciencia). Es una práctica que usa ciencia (principalmente como análisis). Pero no mucha, porque es reducida la práctica de management “correcta”, codificada en forma verificable (“basada en evidencias”). El management es más bien arte (en su búsqueda de ideas profundas [insights] y de visión) y mucha más artesanía (en que está enraizada en la experiencia).

M. B. ¿Está penetrando el posmodernismo en management? Y ¿qué opinas de la afirmación posmodernista de que no hay verdades objetivas y universales ni valores objetivos y transculturales?

H. M. Sí, el posmodernismo está penetrando en algunos sectores. Pero nunca me gustó la palabra. Creo que en arquitectura representa principalmente algunos garabatos en la fachada de un edificio. “Moderno” significa o debiera significar “contemporáneo”. De modo que ¿cómo es posible que algo sea “posmoderno”? Por otro lado, no creo que haya verdades, y menos aún universales. En 1492 descubrimos la verdad: que el mundo es redondo, no plano. No es verdad. El mundo abulta en el Ecuador. Y los suizos saben que no es redondo, ni menos aún plano. Hay que juzgar a las teorías por su utilidad, no por su verdad. Después de 1492 ningún armador corrigió el diseño de los buques por la curvatura del mar. La teoría de la Tierra plana (o al menos del mar chato) ha sido perfectamente útil para construir barcos, aunque no para pilotearlos.

M. B. ¿Qué piensas de los gurús o magos de management? Y ¿por qué hay tantos consultores, e incluso escuelas de management, que se dejan seducir por el gurú del año? ¿Será porque nadie lleva la cuenta de los resultados de sus consejos? ¿O porque no hay una escuela de management dominante (mainstream)?

H. M. Creo que ambas explicaciones son buenas. (Mira nuestro libro Strategy Bites Back, publicado en 2005, en el que reprodujimos la entrevista que le hizo un famoso gurú a Ken Lay, el presidente de Enron, pocas semanas antes de su caída. Como ves, a veces podemos documentar los resultados.) Peter Drucker dijo que los periodistas usan la palabra “gurú” porque “charlatán” no cabe en los titulares. Casi siempre se trata del disparatado culto del héroe.

M. B. ¿Eres optimista o pesimista respecto de la economía mundial? En particular, ¿marchamos hacia una sociedad de la abundancia o de la escasez? ¿Seguirá prosperando y expandiéndose el Imperio Americano? La concentración creciente de la riqueza ¿seguirá estando acompañada de desigualdades socioeconómicas crecientes? Y ¿puede hacerse algo para reforzar la democracia y ampliar el acceso a bienes económicos y culturales?

H. M. Creo que nos estamos dirigiendo a un colapso, y muy malo. No sólo porque el lugar-país-región Estados Unidos tiene esos enormes déficits y desequilibrios de pagos, sino también porque el llamado valor accionario, la compensación de los ejecutivos y el encogimiento [downsizing] han socavado a la mayoría de las corporaciones públicas estadunidenses. Los economistas creen que estas corporaciones se han vuelto más productivas. Todo lo contrario. Si quieres figurar en esas estadísticas económicas, despide a todo el mundo y vende las existencias. Es una gran estrategia, mientras no se agoten las existencias. Hay demasiados gerentes heroicos al timón, y demasiado pocos de esos a quienes importa los productos y los clientes.

M. B. ¿Tienes algún consejo para los ejecutivos y funcionarios de los países subdesarrollados?

H. M. No lea la mayor parte de lo que se publica sobre management. Entienda en profundidad lo que usted administra e interésese apasionadamente por lo que se supone que debe hacer su organización. Comprométase con ella para comprometer a otros. Considere a su organización como una comunidad, no como un conjunto de agentes. El buen desempeño [performance] vendrá como consecuencia. Recuerde que su función como gerente es servir. Gánese su liderazgo. En cuanto usted se considere un líder heroico, estará terminado. Y practique un estilo de management adecuado a su propio país. No hay un estilo universal; o al menos, el que hay es americano y resulta cada vez menos funcional.

Valoración

Filosofía y Sociedad abarca otros temas: la preocupación del autor por aclarar los equívocos más frecuentes referentes a conceptos como sistema, mecanismo y emergencia; su crítica a la tesis de Max Weber sobre la objetividad en estudios sociales; la posibilidad de construir una teoría económica alternativa a la economía estándar, la teoría y práctica del cooperativismo, la sociología de las filosofías y el enfoque escéptico de la política.

De esta forma, la obra expone muchas de sus reflexiones sobre problemas sociales y teóricos, desde un punto de vista filosófico, lo cual lo sitúa en un lugar destacado junto a los académicos más acreditados del mundo.

Referencia

Bunge, M. (2008). Filosofía y Sociedad. México: Siglo XXI.

Texto de Carlos Gonzales-García

Lima, 21 de septiembre de 2019

@MediaLabUNMSM

[CLUB DE JÓVENES CRÍTICOS] ¿Estarías dispuesto a oscurecer tu alma por el poder?

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Perder ante el poder

El hombre, a lo largo del tiempo, siempre se ha caracterizado por ser ambicioso. Su continua insatisfacción de lo que tiene a su alcance y sus ganas de tener poder han corrompido su alma. Asimismo, han originado la destrucción de  otros seres que viven alrededor suyo, sean cómplices o inocentes.

Macbeth, personaje histórico, rey de Escocia de 1040 a 1057, es quien inspira a William Shakespeare a construir una de sus más conocidas obras trágicas bajo el nombre: “Macbeth”. Inmortalizando el sangriento destino del personaje más tiránico, quien es atrapado en la locura del poder.  Este dramaturgo logra plasmar aquellas emociones (miedo, codicia, soledad, ira) de una manera tan cruda y palpitante que hasta hoy en día no deja de ser puesta en escena en diferentes espacios.

”Macbettu” en el Gran Teatro Nacional, trae consigo una renovada versión de la obra trágica «Macbeth» de William Shakespeare. Adaptación traída desde Italia bajo la dirección de Alessandro Serra en la que el sonido, el vestuario, las luces, objetos que intervienen en la obra y el elenco enteramente masculino convergen bajo una atmósfera festiva de los rituales de la isla de Cerdeña.

Una obra con intensidad, fuerza y llena de emociones

“Macbettu” contó con el apoyo del Ministerio de Cultura del Perú y del Instituto Italiano de Cultura en Lima e inauguró el Festival de Teatro Sala de Parto entre escasas luces, perturbables sonidos y un reparto que supo mantener al público atrapado en cada oscura escena. Esta obra despilfarra, entre actores y asistentes,  intensas emociones al presenciar el destino de Macbeth.

En esta obra cada uno de los personajes: Macbeth, Banquo, Lady Macbeth, Duncan, Macduff, entre otros, se encuentran en constante lucha consigo mismos. Mientras el trágico destino circula entre ellos, hasta terminar en un desenlace terrible, estos actos se reflejan en una fuerte acción y presencia corporal realizada por los actores. Por otro lado, se encuentran tres brujas responsables de impulsar y alimentar las ansias de poder del barón de Cawdor (Macbeth), quienes serán también las encargadas de romper la tensión que existe en el ambiente con pizcas de comicidad.

Cada elemento físico como sonoro, dentro de la puesta en escena, no es una simple decoración de la tradición Cerdeña. Desde la daga, los panes pisoteados y las piedras, se revelan la traición, la muerte y la codicia. Mientras que los sonidos transmiten una gran variedad de emociones al formar parte de toda la composición del acto. Un ejemplo son los sonidos de cerdos que se entremezclan con el accionar de los actores al arrastrarse hasta el plato de comida. Desesperados, hambrientos y manchados de sangre, se pelean entre ellos al tratar de tener bajo su dominio su manjar deseado.

Otro aspecto a resaltar, además de la fuerza e intensidad actoral del elenco, es la potencia de voz. Pero, ¿qué pasa si la pieza teatral está en un idioma diferente?  “Macbettu” ,de inicio a fin, utiliza el sardo. Sin embargo, ello no es impedimento para que el público pueda recibir las emociones que se irradian en cada escena (miedo, ira, soledad, etc.). Y ello no solo por el apoyo de la pequeña pantalla donde se ofrece la traducción sino también por el tono, la inflexión y la potencia vocal del actor que hacía escarapelar la piel de los asistentes al oírla.

Qué sería del hombre sin esas emociones

En más de un hecho histórico, el hombre siempre ha estado dominado por la intensidad de sus emociones, aquellas que lo hacen, en muchas ocasiones, perder el sentido de la realidad y pisar la cuerda de la locura. Desde el amor pasional, la ira, envidia, codicia, culpa, miedo entre otras tantas que logran que el hombre se sienta más humano y reafirme su existencia.

“Macbeth”, ahora “Macbettu”,  es una de la piezas teatrales que alcanza a evidenciar algunas de las emociones humanas de la manera más cruda y sanguinaria. En diferentes tiempos y espacios, el personaje no sólo es un ambicioso rey que, como los políticos de hoy en día, no teme corromper su alma con tal conseguir poder. 

Texto de Natali Conde: natali.conde@unmsm.edu.pe

Foto: Gran Teatro Nacional

Lima, 19 de setiembre de 2019

El Club de Jóvenes Críticos es un programa que trabaja en conjunto el enfoque de Educación del Área de Públicos y @MediaLabUNMSM. Estudiantes de Comunicación Social se entrenan en la crítica de artes escénicas a partir de la investigación, observación de procesos creativos y entrevistas con artistas y elencos que se presentan en el @Gran Teatro Nacional.

[LIBROS FAVORITOS] «Habitación en Roma», de Jorge Eduardo Eielson

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Por: Oswaldo Bolo Varela

I

Si el arte nos conmociona y si “vivir es una obra maestra”, la poesía-vida de Jorge Eduardo es una experiencia que sacude y descoloca. Escribió varios tratados emocionales, una educación sentimental a la que afortunadamente, recién por estos años, podemos acceder con facilidad: palabras (e imágenes) sobre nuestros cuerpos frágiles, palabras/imágenes sobre algunos personajes amados con entrega y devoción, palabras-imágenes-exploraciones sobre aquello que parece pero no es.

Su testimonio poético más emocionante, para mí y por estos días, se titula Habitación en Roma ([1955] 2008). Creo que, entre muchas otras cosas, es un poemario sobre la soledad.

Creo también que es un poemario parcialmente escrito para conflictuados o atormentadas que salen a caminar. Sujetos desesperados cuya emoción podría simbolizarse en esas ganas por dejar la habitación y, tratando de buscarse la calma fuera, salir a caminar –a huir– por las calles de la ciudad. A ellos, a todos nosotros, Eielson va a decirles que ese gesto solo agudiza la desesperación.

Originalmente, el manuscrito lo componían veinte poemas; luego, en la edición que Lustra tiró, Martha Canfield le añadió uno más, también un prólogo que orienta y una entrevista que conmueve. Solo luego de cincuenta y tres años se publicó como un libro independiente; antes, formó parte de ese libro ahora inhallable llamado Poesía Escrita.

Son versos para caminantes, decía. Describen algunos lugares emblemáticos (y ruinosos) de esa Roma de posguerra y a varios de los sujetos emputecidos que por allí deambulan. Pero, sobre todo, son poemas que reflejan el vaivén emocional del sujeto que camina, duda y (se) contempla.

II

Ejemplifiquemos un poco, para que la belleza esté certificada. No pretendo hacer aquí un análisis lírico, sino tan solo comentar algunas ideas sueltas sobre algunos versos. Algo así como por qué me gustan mucho. Piensen en ese fan que canta con desafino pero emoción las canciones de su artista favorito: así me posiciono al escribir estas líneas. Así que vayamos con tres títulos largos y tres extractos más cortos de Habitación en Roma.

Al principio, abriendo el libro, aparece Elegía blasfema para los que viven en el barrio de San Pedro y no tienen qué comer: un señalamiento del descrédito que posee la institución más antigua de nuestro mundo, una duda burlona sobre el poder de la Iglesia: «(no haber visto nunca el cielo / significa solamente / no tener dinero / ni para los anteojos)».

Luego, un poco más adelante, Poema para leer de pie en el autobús entre la puerta Flaminia y el Tritone: un manifiesto sobre el despojo, la precariedad y lo absolutamente jodido que uno debe estar para andar «pidiendo limosna a las nubes / desenterrando objetos llameantes / buscando a dios entre las patas de una mesa».

Veinte páginas después, recordándonos que «amanecer es horrible / en estas condiciones» y que «¿cómo pueden reclamar / lo que nunca han conocido / sino en los pálidos versos de un pálido poeta», está Poema para destruir de inmediato sobre la poesía, la infancia y otras metamorfosis. Un reclamo hacia su pasado.

Estos no son los únicos buenos poemas, por supuesto. Algunos que recuerdo ahora con fugacidad: Campidoglio, donde te confiesa que «usted no sabe cuánto pesa / un corazón solitario»; Via Veneto, que es una duda sobre su materialidad (y utilidad) como poeta: «Me pregunto / si realmente poseo / una cabeza y dos pies / y no tan solo guantes / y zapatos y sobrero»; y Albergo del Sole II, uno de mis poemas dolorosamente favoritos, en el que Eielson se arrepiente de algo y propone que «un día tú un día / abrirás esa puerta […]/ y verás un trapo inmundo / en lugar de mi alegría».

III

Leer a Eielson resulta estimulante, también interpelador. Y creo que esto se ejemplifica bien en el poema que posiblemente más me conmueva de este libro, y con el cual acabo este escrito (una breve invitación a que hallen sus poemas y también se dejen conmover). Se llama Junto al Tíber la putrefacción emite destellos gloriosos y es un poema de amor, de amor por la humanidad. Es una extensa vacilación sobre el sentido que tiene hacer estética y no política, sobre la validez moral de escribir versos cuando hay hambre alrededor: un dilema ya bastante conocido, pero no por ello carente de vigencia. El poeta se resuelve en este dilema proponiendo que «su vergüenza es solo un manto de palabras». Es decir, que escribe porque justamente siente vergüenza y así, con este acto, algo de ese adormecimiento que frecuentemente se reclama a la escritura se va. Sus versos ya no será versos dormidos, dice Jorge Eduardo, sino balazos. Una posibilidad para la subversión de la palabra:

Junto al Tíber la putrefacción emite destellos gloriosos

heme aquí juntando

palabras otra vez

palabras aún

versos dispuestos en fila

que anuncien brillantemente

con exquisita fluorescencia

el nauseabundo deceso

del amor

millares y millares

de palabras escritas

en un wáter-close

mientras del cielo en llamas

de roma

cuelgan medias y calzoncillos

amarillos

cómo puedo yo escribir

y escribir tranquilamente

y a la sombra de una cúpula impasible

de una estatua

que sonríe

y no salir gritando por los barrios horrendos

de roma

y lamer las llagas de un borracho

desfigurarme la cara

con botellas rotas

y dormir luego en la acera

sobre los excrementos tibios

de una puta o un pordiosero

podría llenar cuartillas

y cuartillas aún peores

contar historias abyectas

hablar de cosas infames

que nunca he conocido

mi vergüenza es solo un manto

de palabras

un delicado velo de oro

que me cubre diariamente

y sin piedad

pero si algún día

un instante junto al tíber

sin un ruido

ni un silbido

ni una nube

ni una mosca

al pie del río

con tan solo

un cigarrillo

una cerilla

y una silla

en tanto estío

se levanta en mí un sollozo

¡oh maravilla!

semejante a una montaña

o a un mosquito que aparece

cada siglo en el cenit

aquel día

yo os lo juro

arrojaré al canasto

el universo entero

renacerá el amor

entre mis labios resecos

y en estos versos dormidos

que ya no serán versos

sino balazos

Jorge Eduardo Eielson, 1955

Por: Oswaldo Bolo Varela

Lima, 16 de setiembre de 2019

@MediaLabUNMSM

[CLUB DE JÓVENES CRÍTICOS] “Nosotros también hacemos gran música de bandas sonoras”

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Indudablemente, la música y el cine siempre han ido de la mano. Incluso desde los tiempos de las películas mudas en las que las bandas sonoras tocaban en vivo al compás de las acciones que transcurrían en la pantalla. La conjugación de la música y el cine a lo largo de los años nos ha regalado clásicos

¿Quién no se ha involucrado en el mundo de la mafia al escuchar la banda sonora de El padrino?¿Quién no se ha sentido en una persecución, en el caso de la banda sonora de “Misión imposible?

En referencia al último concierto  de la Orquesta Sinfónica Nacional, “Un viaje a través del cine” en el que se tocaron 14 piezas musicales de clásicos del cine, entrevistamos al director, Fernando Valcárcel.

Preparación

¿Cuánto tiempo de preparación tuvieron para este espectáculo artístico?

Es una semana, en realidad. Todos los conciertos por lo general tienen una semana. Usualmente es el tiempo estándar para cualquier repertorio. Cuando hay obras o repertorios muy difíciles tenemos preparación incluso de dos semanas y hacemos obras largas tipo ópera, por ejemplo.

Selección de las piezas musicales

Son 14 piezas musicales de bandas sonoras de películas del cine, ¿cuál ha sido el criterio para escoger las bandas sonoras en el repertorio final?

La selección la hago yo, y esto tiene muchos motivos. El primero, el más práctico, es que disponemos de la música, cosa que es muy difícil a veces, porque la música, en general, es cara, cuesta, y la música de películas, más. Además, hacer un espectáculo de esta naturaleza es complicado porque usa muchos elementos como músicos adicionales, en el caso de este evento vamos a tener la suerte de tener al Coro Nacional, una cantante solista incluso, y hasta imagen vamos a proyectar.

Entonces, todo eso cuesta, todo es caro, carísimo, son permisos, si cuantificáramos todo lo que vale esto, te sorprenderías, entonces es un lujo, yo para abaratar costos, para alquilar y no comprar más cosas y no gastar en más cosas, uso parte del material que ya está en nuestro poder, es un criterio lógico.

El segundo criterio es un poco apuntar a cosas conocidas y hacer un balance entre cosas que no son tan populares, son tipos de música más intelectuales, más refinadas, menos sujetas a la tiranía de la imagen, que muchas veces te pide que cortes, te pide que apeles a una cierta emocionalidad más inmediata, está expeditada al efecto, no necesariamente eso le quita validez a esa música pero muchas veces la música cinematográfica depende mucho de la imagen, puede venir simple o muy simple en cambio las obras que han sido escritas para ser escuchadas tienen una vida propia.

Por lo tanto, yo creo que hubo una selección variada y el público va a tener la oportunidad de escuchar cosas que no escucharían en otras circunstancias, por ejemplo, Atmósferas de Ligetti que es una obra contemporánea de la década de mi 1960 que la incluyó Stanley Kubrick en su película 2001: Odisea en el espacio, esas obras son intelectuales.

Y en cuánto a esa selección, usted considera que como cinéfilo, ¿no solo va al cine a ver, sino a escuchar música?

Sí, mira yo admiro mucho el cine, no soy un gran conocedor, hubo un tiempo en que sí me preocupe por ver los clásicos del cine. Pero es cierto, mi apego hacia la música sinfónica, hacia el sonido, me hace ser muy crítico a la hora de escuchar, muy selectivo además. Una mala banda sonora arruina una película, y hay cosas que a mí en lo personal, no me han satisfecho del todo, y son películas buenas pero su música no. Una buena banda sonora te puede cambiar una película, para bien por supuesto. Sí trato de escuchar  o de ir al cine y escuchar muy atentamente lo que se puede proponer sonoramente.

¿Usted cree esa selección de piezas musicales de las películas de su época no hubiesen sido lo mismo si es que no las hubiesen incluido esa banda sonora?

Tal vez sería exagerado decirlo, pero indudablemente ganan transcendencia, qué sería decir que El padrino no hubiese sido una buena película sin la música, claro Nino rota. Sería exagerado, es una gran película pero indudablemente la música seduce más, la da una connotación más de mito clásico, lo hace trascendente, aporta realmente. La música de Stanley Kubrick apoya mucho la parte visual, y atemporal, y a veces abstracta de su propuesta.

Complicaciones del ensayo

¿Cuáles han sido las complicaciones en los ensayos a la hora de adaptar estas bandas sonoras?

Cada banda sonora tiene sus virtudes y sus complicaciones, Atmósferas de Ligetti es una obra que recién la pudimos ensayar, y tiene ciertas complicaciones a la hora de montarla, hacer que se junte. La otra es La amenaza de los fantasmas de La guerra de las galaxias, episodio 1, porque es grande, en algunas cuestiones rítmicas, en realidad no es tan exigente, tan complejo, el Adagio de Barber por la parte expresiva.

Gustos y colores

En sus predilecciones, ¿cuál sería de su agrado en la que la música sobresalió mucho más que la propia película?

En realidad, dos hombres y un destino, ahora que lo pienso, o sea Bach Casi Sandatcsky yo la he visto hace mucho ya casi ni me acuerdo y yo elegí su música porque es una canción muy conocida, Rain Drosty on my head. Ahí diríamos que no tuve un apego hacia la obra cinematográfica sino hacia la música en sí. Pero en los otros casos, sí me ha gustado mucho el espectáculo visual sea profundo o no, porque el episodio uno de Los vengadores son cosas menores, tienen otro sentido más de entretenimiento, más indulgente, más comercial, pero son en su contexto obras bien hechas, son bandas sonoras bastante bonitas, digamos que hay un poco de todo y que haya una selección entre lo muy conocido y lo menos conocidos.

A cuestión personal, algo revelador, cuál sería la película que más le gusta, indiferentemente de la banda sonora y a su vez, de estas 13 piezas de banda sonora, cuál le gusta más.

Yo creo que como cineasta, de todos los incluidos en esta selección yo creo que sería Kubrick, el que tiene más conocimientos acerca de los alcances de la música, conjuga muy bien la imagen del sonido de tal manera que en este caso yo diría que Kubrick, 2001 odisea en el espacio yo creo sería mi favorita.

Bandas sonoras peruanas

¿Ha tenido oportunidad de asistir a alguna película del cine peruano?, ¿cuál es su opinión acerca de la banda sonora?

He visto pocas, no tengo un gran conocimiento, sin embargo. Ha habido, claro, Enrique Pinilla, por ejemplo, ha hecho cosas muy buenas en la academia de 1970, con Robles Godoy, Enrique Turriaga también y principalmente en Herbasonic la música ha sido incluida en algunas películas como la del Delfin, que es una película animada peruana. Es una obra bonita, muy bien hecha se presta muy bien al cuento, a la historia, y me parecía muy bien oportuno incluir la obra de un peruano para que se vea que nosotros también hacemos gran música de bandas sonoras.

Entrevista y edición de Aldair Guerra: aldair.guerra@unmsm.edu.pe

Fotografía de Yessenia Conde: yessenia.coronel@unmsm.edu.pe

@MediaLabUNMSM

Lima, 15 de setiembre de 2019

El Club de Jóvenes Críticos es un programa que trabaja en conjunto el enfoque de Educación del Área de Públicos y @MediaLabUNMSM. Estudiantes de Comunicación Social se entrenan en la crítica de artes escénicas a partir de la investigación, observación de procesos creativos y entrevistas con artistas y elencos que se presentan en el @Gran Teatro Nacional.

[CLUB DE JÓVENES CRÍTICOS] Galería fotográfica

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¡Viajar a través del cine nos llena de magia!

En un nuevo concierto sinfónico, la Orquesta Sinfónica Nacional junto al Coro Nacional presentaron Un viaje a través del cine en el Gran Teatro Nacional. Este concierto, que reveló el vínculo complementario que existe entre el cine y la música, tuvo como invitada a la solista María del Carmen Rondón.

Las puertas mágicas del cine se abren al compás de la música: violines, violas, trompetas y flautas comienzan a interpretar las melodías fuertes y rítmicas de Así habló Zaratustra. Todo está listo para iniciar Un viaje a través del cine…

El maestro, Fernando Valcárcel, y la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN) están listos para guiar  al público a diferentes episodios del cine mundial.
El maestro, Fernando Valcárcel, y la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN) están listos para guiar  al público a diferentes episodios.
Para Valcárcel la selección de las piezas musicales fue un trabajo arduo. Hubo muchas composiciones en las listas, pero ¿cuáles se eligieron para este concierto musical?
Para Valcarcel la selección de las piezas musicales fue un trabajo arduo.
Una serie de imágenes de la película Odisea del Espacio se reproducen al compás de la pieza musical Atmósferas. ¡No estamos en el cine pero estamos viajando a través de él!
Una serie de imágenes de la película Odisea del Espacio se reproducen al compás de la pieza musical «Atmósferas»
La interpretación de cada partitura nos conduce por los senderos de guerras, disputas, desamor, aventuras y espionajes. ¡En el mundo cinematográfico, el sonido alimenta cada sensación!
La interpretación de cada partitura nos conduce por los senderos de guerras, disputas, desamor, aventuras y espionajes
Grandes íconos del cine mundial se recordaron en este concierto. Por ejemplo, la suite musical de Indiana Jones y El padrino se encargaron de transportarnos por las travesías y hazañas de sus personajes
Grandes íconos del cine mundial se recordaron en este concierto.
A las melodías de la Orquesta Sinfónica se le sumaron las voces del Coro Nacional: imágenes, música y canto se entrelazaron para hacer de este concierto musical una experiencia llena de magia.
A las melodías de la Orquesta Sinfónica se le sumaron las voces del Coro Nacional: imágenes, música y canto se entrelazaron para hacer de este concierto musical una experiencia llena de magia.
La Marcha de los asaltantes, la música de La misión, y la suite de El bueno, el malo y el feo son recibidas con gran expectativa por los asistentes... ¡Sus aplausos hacen notar que no estamos en el cine, sino en el teatro!
La Marcha de los asaltantes, la música de La misión, y la suite de El bueno, el malo y el feo son recibidas con gran expectativa por los asistentes
¡La OSN comienza a interpretar la suite musical de Star Wars! De pronto, personajes de la serie Star Wars, están en el escenario del Gran Teatro Nacional. ¿Quién es? ¿Lo conocen?
¡La OSN comienza a interpretar la suite musical de Star Wars! De pronto, personajes de la serie Star Wars, están en el escenario del Gran Teatro Nacional.
Mientras la Orquesta Sinfónica Nacional es dirigida por el maestro “Jedi” de la música; los niños, jóvenes y adultos quedan cautivados por la fuerza oscura de Star Wars…¡No es ficción sino realidad!
Mientras la Orquesta Sinfónica Nacional es dirigida por el maestro “Jedi” de la música; los niños, jóvenes y adultos quedan cautivados por la fuerza oscura de Star Wars
¡La función ha llegado a su fin! El público se pone de pie para despedir a quienes, mediante la música, revivieron las mejores producciones cinematográficas del mundo.
¡La función ha llegado a su fin! El público se pone de pie para despedir a quienes, mediante la música, revivieron las mejores producciones cinematográficas del mundo.

FICHA TÉCNICA

Director Titular de la OSN: Fernando Valcárcel

Director del Coro Nacional: Javier Súnico

Solista invitada: María del Carmen Rondón

PROGRAMA:

PARTE I

Así habló Zaratrusta

Atmósfera

-Misión Imposible

“Raindrops keep fallin’ on my head”

-Música de La misión

-Suite de El Bueno, el malo y el feo

PARTE II

– “Marcha de los asaltantes”

Adagio

-Suite de El padrino

-Suite de El Delfín. La historia de un soñador

“Oogway asciende”

-Música de Los Vengadores

-Suite de Star Wars

Fotografías y texto de Yessenia Coronel: yessenia.coronel@unmsm.edu.pe

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@MediaLabUNMSM

Lima, 14 de setiembre de 2019

El Club de Jóvenes Críticos es un programa que trabaja en conjunto el enfoque de Educación del Área de Públicos y @MediaLabUNMSM. Estudiantes de Comunicación Social se entrenan en la crítica de artes escénicas a partir de la investigación, observación de procesos creativos y entrevistas con artistas y elencos que se presentan en el @Gran Teatro Nacional.