Por: Sergio Velarde. *Si ya de por sà la desinformación es un problema, ninguna tiene tanto potencial destructivo como aquella que se refiere al cuerpo humano y su funcionamiento. Para Natalia Aruguete (2020) la clave está en la polarización afectiva, es decir, el predominio de lo emocional frente a la razón en determinadas circunstancias.
Por: Kelly Cárdenas. *Para el estudio de la infordemia se debe considerar, además, tres tipos de trastornos de la información: disinformation, misinformation y mal-information.