Por: Jesús Huamán Duránd. *Las organizaciones verificadoras de hechos (fact-checkers) representan, en plena pandemia, a los personajes principales que luchan cara a cara contra la desinformación. En estos momentos están desarrollando su trabajo de manera objetiva, precisa y veraz haciendo uso del fact-checking.
A través de la revisión documental, con base al enfoque cualitativo e interpretativo, el presente trabajo pretende realizar un recuento de los principales términos utilizados actualmente en el manejo de la información: disinformation, misinformation, posverdad y fake news. Términos que evidencian la relevancia que ha adquirido la información obtenida a través de las redes sociales y que en consecuencia generan un desorden informativo.
Por: Sergio Velarde. *Si ya de por sí la desinformación es un problema, ninguna tiene tanto potencial destructivo como aquella que se refiere al cuerpo humano y su funcionamiento. Para Natalia Aruguete (2020) la clave está en la polarización afectiva, es decir, el predominio de lo emocional frente a la razón en determinadas circunstancias.
Por: Genjy Simon Ríos. *Con la aparición de la “infodemia”, causada por la pandemia del coronavirus, el fact-cheking se presenta como antídoto contra la desinformación.
Por: Kelly Cárdenas. *Para el estudio de la infordemia se debe considerar, además, tres tipos de trastornos de la información: disinformation, misinformation y mal-information.
Por: Milagros Otárola. *Desde curas milagrosas, avistamiento de ovnis, desclasificación de archivos secretos de reconocidas agencias de inteligencia, hasta teorías de conspiración, todo circula por redes sociales y forman parte del conjunto de noticias que produce desinformación.
Por: Sergio Paolo Velarde. * El construir un fake como este requiere tiempo y esfuerzo. No es una casualidad de un ciudadano mal informado. Hay que buscar las fotos y videos en la red, crear las cuentas y empezar a divulgar.
Por: Genjy Simon Ríos. * Los problemas de la desinformación se originan por la poca rigurosidad que tienen los medios, y las personas que trabajan en ellos, al seleccionar sus fuentes de información. Mar de Fontcuberta (1993), define las fuentes como “personas, instituciones y organismos de toda índole que facilitan la información que necesitan los medios para suministrar noticias” (p. 58). En sintonía a la definición anterior, Borrat (1989) nos dice que cuanto mayor sea la cantidad, la calidad y la diversidad de informaciones que comunica y de las fuentes que cita, tanto mayor será su credibilidad y por tanto su influencia.
Por: Jesús Alexis Huamán Duránd. *La infodemia responde a un razonamiento motivado de las personas que las difunden por redes sociales, ya sea por la creencia de encontrar el anhelado antídoto o algún prejuicio colectivo.
Por: Sergio Crispín Buiza
* Gracias a internet, los receptores de información dejaron de ser completamente pasivos y se les dio la posibilidad de convertirse en prosumidores. Lamentablemente esta capacidad dejó al descubierto la existencia de una cantidad de usuarios con ciertas características: más centrados en sí mismos que en la sociedad; en búsqueda de autoafirmación; con resistencia a verse cuestionados. Son los denominados “trolls”.