Olivia Sohr: “Las desinformaciones no son solamente titulares falsos”

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Esta entrevista forma parte de nuestra serie sobre desinformación en tiempos de pandemia.

#ContraLaDesinformación

En esta primera entrega la periodista, coordinadora de Chequeado y de la red Latam Chequea Coronavirus, Olivia Sohr, nos concedió una entrevista para conversar sobre desinformación, fake news, su impacto y la labor de los medios de comunicación en tiempos de pandemia por la Covid-19.

El término fake news se usa de manera indistinta y genera, muchas veces, confusiones, ¿a qué atribuye esto?

En Chequeado preferimos no usar el término fake news, en general hablamos de desinformaciones. El concepto de fake news tiene varios problemas. Por un lado, da la idea de que son siempre noticias cuando en realidad los formatos en que circula la desinformación muchas veces son audios de WhatsApp, videos trucados o son otro tipo de formato que no necesariamente corresponde a lo que uno generalmente llamaría una noticia. Por otro lado, también hay un uso intenso por parte de algunos actores para deslegitimar todo tipo de información que no les gusta —tildándolo de fake news—  y eso hace que se desvirtúe un poco el término y no termina siendo muy exacto para lo que uno quiere transmitir.

¿Qué opina del uso del término bulo?

Bulo es muy español, nos encantaría poder usarlo, pero no estamos seguros de que se entienda bien en Argentina o en otros contextos. En general, hablamos de desinformaciones virales cuando comentamos, específicamente, de redes sociales. De hecho, hay una distinción que existe en inglés que no existe en español y que puede, digamos, complejizar nuestro trabajo. En inglés hay una diferencia entre disinformation y misinformation.

Disinformation es la desinformación que circula con cierta intención de desinformar, mientras que misinformation son las cosas que se compartirán más por ignorancia o sin saber que lo que se está compartiendo es algo falso. Nosotros no tenemos esa distinción en español y hablamos en general de desinformación simplemente, pero es un campo abierto a mejoras en cuanto a los términos que usamos, ya que es un fenómeno que está evolucionando todo el tiempo. Estamos siempre como corriendo para obtener las mejores definiciones a fin de poder describirlo y que sea útil para nuestro trabajo.

¿La desinformación depende de la intencionalidad?

Olivia Sohr

Sí. Nosotros en Chequeado, en general, no evaluamos la intención. No lo hacemos cuando chequeamos a políticos o a referentes públicos. No es que decimos “quiso mentir”. De hecho, no usamos en general la palabra “mentir” porque significa que tiene cierta intención, decimos que lo que se dice no corresponde con los datos por lo tanto es falso, pero no medimos la intención de quienes lo hacen. En redes sociales, lo más difícil es saber exactamente en qué casos se comparten a sabiendas y con mala intención, y en qué casos se hacen por ignorancia.

Hay algunos casos que son muy claros. Si uno ve, por ejemplo, los pseudo documentales que circulan ahora sobre el coronavirus, donde hay un trabajo de producción y presentan desinformación muy clara que no está basada en ninguna evidencia […] Hay algunos casos en el otro extremo, en los que probablemente nuestra tía, tío y demás nos compartió una de las supuestas curas para el coronavirus, pero que en realidad es una de las curas que se utiliza tradicionalmente para la gripe como tomar té con jengibre, comer ajo, todo ese tipo de cuestiones, pero cuando nuestro el tío nos lo mandó no estaba tratando de desinformarnos activamente, sino que pensó que quizá eso podría ayudarnos en el caso de que nos diera coronavirus o algo por el estilo. Ahí probablemente uno podría decir que no hay una intencionalidad, pero después hay una serie de grises en el medio, que es muy difícil determinar cuál es la intención de la persona que produce o comparte la desinformación.

¿Considera que desinformaciones, como la del dióxido de cloro, circulan más en Latinoamérica?

Hay muchas desinformaciones que circulan en Latinoamérica, la del dióxido de cloro es especialmente problemática por el daño directo que puede generar en la salud de la gente. Muchas veces, nosotros hablamos de la desinformación en términos, quizá, un poco más abstractos como los problemas que trae para la discusión democrática, en el caso del dióxido de cloro es un riesgo muy concreto y peligroso para la salud de las personas. Creo que hay especificidades en Latinoamérica en cuanto al tipo de desinformaciones que circulan, pero no estoy segura de que circulen más. Nosotros tenemos colegas en Asia, en África y en Europa, y no te podría decir que la cantidad de desinformaciones o la gravedad sea más acá, de hecho, en África la desinformación sobre temas de salud la vienen estudiando hace bastante (tiempo) porque son muy complicados, con lo cual no estoy segura de que sea una cuestión regional y, de hecho, nosotros tenemos una red que se llama Latam Chequea donde tenemos chequeadores de casi todos los países de América Latina. Y sobre el coronavirus hicimos una base en donde nos compartimos los chequeos para poder reaccionar lo más rápido posible, cosa de que si un colega había chequeado algo ya en México, nosotros pudiésemos retomarlo y no tener que hacer el trabajo de cero, de chequearlo nuevamente y si después aparecía algo en Brasil, nuestros colegas en Brasil pudiesen retomarlo.

¿Coincide en que cada vez es mayor la presencia de los fact checkers?

Sí, de hecho, Perú es uno de los países donde hay más chequeadores. Está Ojo Público, Salud con lupa, La República que tiene su área de verificación, y está Convoca, con lo cual hay un montón. Nosotros en Latam Chequea lo que tratamos de hacer es juntar esfuerzos con todos los chequeadores, eso incluye en muchos casos que la mayoría sean chequeadores que son medios nativos digitales que han aparecido en la última década como Ojo Público y Salud con lupa, pero también a medios tradicionales que han abierto su área de chequeo de información como La República. En distintos países tenemos distintas alianzas con distintos medios y distintos formatos, lo que a nosotros nos importa es tener acceso a la mejor información posible y si nuestros colegas del medio que están en Perú chequearon algo que después empieza a circular en Argentina nos sirve poder tener eso. 

El ejemplo de Salud con lupa es súper interesante porque es de los pocos medios que antes de la pandemia tocaba en profundidad temas de salud y con una mirada regional. Para Latam Chequea fue importante la alianza con ellos para que pudiesen proveer notas en profundidad de temas que a veces son muy complejos  de tocar como son los referidos a salud. Y ellos ya venían con una experiencia y una capacidad de análisis y profundidad que no necesariamente el resto de los otros chequeadores teníamos en temas de la salud.

Esta entrevista fue realizada por:

@Kelly Cárdenas Ortega: kelly.cardenas1(at)unmsm.edu.pe   

@Sergio Crispín Buiza: sergio.crispin(at)unmsm.edu.pe  

@Jesús Huamán Duránd: jesus.huaman13(at)unmsm.edu.pe  

@Milagros Otárola Ccochachi: milagros.otarola(at)unmsm.edu.pe  

@Genjy Simon Ríos: genjy.simon(at)unmsm.edu.pe  

@MediaLab UNMSM

Lima, 18 de setiembre de 2020

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