La mañana del 25 de junio del 2009, la policía hallaba el cuerpo, casi en descomposición, de la cantante folclórica Alicia Delgado Hilario dentro de su departamento en Miraflores. Su muerte causó gran impacto tanto a nivel nacional como internacional.
Según el informe forense el cuerpo llevaba un día sin vida. Fue encontrado boca abajo, con signos de tortura y violación, además, tenía nueve puñaladas y evidentes señales de estrangulamiento; sin embargo, se encontró tejido de piel bajo las uñas, lo que demostraba un intento de defensa por parte de la fallecida. El departamento se encontraba en perfecto estado, por ende, los forenses dedujeron que alguien de su entorno era el homicida.
Cuatro días después del anuncio de la muerte de la “Princesa del folklore peruano”, detuvieron a Pedro César Mamanchura, ex chofer de Alicia Delgado, en Tumbes, intentando fugarse del país. Por ello, se convirtió en el principal sospechoso del homicidio. Una vez declarándose como actor principal del homicidio, culpó a Abencia Meza de darle la orden de asesinar a Alicia. Al día siguiente, el 17 Juzgado Penal de Lima ordenó la detención preliminar de Abencia Meza.
El 7 de julio del 2009, Elizabeth Figueroa Cortez, titular de la 50 Fiscalía Provincial de Lima, denuncia penalmente, ante el Poder Judicial, a Pedro Mamanchura por el asesinato de Alicia Delgado y a Abencia Meza como autora intelectual del crimen. Dos días después, Abencia es trasladada al penal de Mujeres de Chorrillos y Pedro Mamanchura es llevado al penal de máxima seguridad Miguel Castro Castro, en Canto Grande.
No obstante, Abencia Meza fue liberada tiempo después, aunque también regresó a prisión. Hace dos años, el 19 de enero del 2019, la defensa legal de Abencia Meza presenta, ante el Quinto Juzgado Penal Unipersonal de Cajamarca, un recurso para que se revise la sentencia que mandó a prisión a la cantante folclórica. Señalaban una supuesta vulneración de sus derechos al debido proceso, la debida motivación de las resoluciones judiciales, a la presunción de inocencia, a la igualdad, libertad personal y principio de congruencia o correlación. No obstante, la Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema, presidida por el magistrado Jorge Castañeda, ratificó por unanimidad la condena a Abencia Meza Luna al declarar que no hay nulidad en la sentencia.