La marea verde: ¡Sí se pudo, hermanas!
El pasado 11 de diciembre, con aproximadamente 20 horas de debate, la Cámara de Diputados de Argentina aprobó con 131 votos a favor, el Proyecto de Ley sobre la interrupción legal del embarazo. Este miércoles 30 obtuvo el voto a favor de 38 senadores, con otros 29 en contra y una abstención.
Argentina se regía por una ley de 1921 que posibilitaba abortar en caso de violación sexual o de peligro para la salud de la madre, pero en lo concreto, muchas provincias no lo permitían incluso con las dos razones anteriores.
El presidente de centro-izquierda Alberto Fernández se manifestó en Twitter. «El aborto seguro, legal y gratuito es ley (…) Hoy somos una sociedad mejor que amplía derechos a las mujeres y garantiza la salud pública», escribió tras lo acontecido.
El gobierno calcula que hay entre 370000 y 520000 abortos clandestinos anuales, en un país de 45 millones de habitantes. En 1983, desde la restauración democrática, hubo más de 3000 mujeres muertas por abortos. Con estos precedentes y más se valieron las activistas feministas para sustentar sus argumentos.
Proyecto de Ley sobre la legalización del aborto
Las mujeres y personas con otras identidades de género con capacidad de gestar tienen derecho a:
- Decidir la interrupción del embarazo (según lo establecido en esta ley).
- Requerir y acceder a la atención de los servicios de interrupción del embarazo en el sistema de salud.
- Requerir y recibir atención postaborto en los servicios del sistema de salud.
- Prevenir los embarazos no intencionales mediante el acceso a la información, educación sexual integral y métodos anticonceptivos eficaces.
La legalización del aborto se convierte así en el mayor éxito político de Fernández en el año que lleva en la Casa Rosada. No hay cifras oficiales confirmadas, pero se estima que en la Argentina hay 450.000 abortos clandestinos anualmente. Otra vez, los jóvenes sorprendieron por llevar la vanguardia en este movimiento.