«Radical House» es el nuevo proyecto audiovisual que Icpna Cultural estrenó vía redes sociales el viernes 14 de agosto.
Pepe Hevia, coreógrafo y director, nos trae esta obra realizada íntegramente desde el confinamiento. Durante estos meses, los bailarines de Hevia Dance Company exploraron la relación de sus cuerpos con el espacio al que se vieron reducidos durante la cuarentena: el hogar.
«Radical House es una obra de contenciones emocionales. Viaja desde la cotidianidad hasta la alucinación»
afirma Pepe Hevia.
La preparación y coordinación para lograr dar vida a este proyecto de videodanza consistieron en un lento e inmersivo proceso de experimentación del movimiento en relación a la estructura de las casas de todos los involucrados. Azoteas, patios, jardines, salas y pequeñas habitaciones fueron los espacios protagonistas.
Los bailarines exploraron su teatralidad, dejándose llevar por el ambiente, la música y principalmente, por las emociones que les generaban la falta de contacto humano, las fronteras y la nueva normalidad.
Según el director, cada bailarín fue responsable de su propia grabación, lo cual los compromete no solo a nivel del movimiento, sino a nivel de composición escénica. Fue un proyecto desde el confinamiento pero un proceso de aprendizaje colectivo, unidos por el sentido de aislamiento.
Otro aspecto a resaltar es el proceso de edición. Un viaje que el mismo director fue descubriendo en el camino. “El ejercicio de editar es como coreografiar.”
afirmó Pepe Hevia en el fanpage de Icpna Cultural.
El proyecto constó con las grabaciones originales de los bailarines y la edición posterior con animaciones para darle el efecto esperado: “la radical relación entre el cuerpo, la casa y la tecnología”, en palabras del director al explicar de dónde proviene el nombre “Radical House”.
Radical House resulta una interesante propuesta para la creación de danza desde cualquier espacio bajo condiciones que pueden parecer desalentadoras para el sector artístico durante esta crisis sanitaria.
