Sport Boys: la inyección internacional que necesitan los rosados para “ascender hasta el tope”
La última vez que el club chalaco compitió en un certamen internacional fue en la Copa Libertadores del 2001. El principal objetivo de este año para el Boys es volver a pisar suelo extranjero para representar al Perú.
“No hay en el suelo chalaco un solo muchacho con más de un pulmón, que no ande ronco los lunes por tantos chimpunes que dio al Sport Boys”. Hace mucha falta que estas letras del gran Jorge ‘El Carreta’ Perez vuelvan a palpitar en el corazón del Callao, el Estadio Miguel Grau, para un desafío internacional. De hecho, los hinchas rosados han tenido que lidiar con casi 20 años sin gozar que su equipo compita no solo por el pueblo chalaco, sino también por el país.
La Copa Libertadores del 2001 marcó el fin de la presencia del Sport Boys en las competencias internacionales. Desde entonces, la ‘Misilera’ ha tenido más bajos que altos, con un calvario interno, incluso descendiendo de la primera categoría en el 2008 y en el 2015.
Pero eso no es lo que manda en los chalacos. La historia siempre le ha respaldado de la mejor manera. Sus seis coronas no han sido casualidad, su reconocimiento como primer campeón del Perú en la era profesional tampoco lo es.
Hace falta retroceder algunos años, cuando Sport Boys conocía muy bien lo que era representar al Perú fuera del país. En las páginas más gloriosas del club está una llamada “Berlín 1936”, cuando once rosados se pintaron de ‘Blanquirrojo’ para entonar a todo pulmón el Himno Nacional-uno de los más bellos del mundo-en los Juegos Olímpicos de aquel año.
Esa experiencia internacional con el Boys como protagonista sirvió para los desafíos que venían por delante. Al año siguiente, los porteños conquistaron su segundo título nacional de manera invicta. Para otro reto en el exterior tuvieron que esperar unos años más.
-Presencia en la Libertadores-
La Copa Libertadores se fundó recién en 1960, entonces conocida como Copa Campeones de América, y bastaron solo siete años para que el Sport Boys marcara su primera presencia en el certamen continental. Luego, ‘La Misilera’ tuvo cinco participaciones más en dicho torneo(1977, 1985, 1991, 1992, 2001), pero nunca ha podido pasar de la primera fase.
Para ubicar la última victoria del Sport Boys en la Copa Libertadores, tenemos que retroceder hasta 1991, curiosamente cuando la epidemia del cólera azotó al país. Los rosados vencieron por 3-1 a Universitario en el Estado Nacional en un encuentro de fase de grupos. Ahora, en medio de la pandemia por el coronavirus, los porteños no han vuelto a saborear la miel del triunfo por casi 30 años, ni han competido por casi 20 en la Copa.
Desde el 2001, el Boys ni siquiera ha aparecido en la Copa Sudamericana, que se creó en el 2002. Y es que en los últimos años, los porteños se han preocupado más por evitar perder la categoría que por luchar por un cupo internacional. Las cosas no han ido nada bien en el club, incluso en el 2016 se salvó del descenso de la Segunda División.
Esa terrible recuerdo golpeó muy duro a los rosados y les hizo reaccionar instantáneamente. En el 2017, el club chalaco consiguió su retorno a Primera y últimamente está tratando hacer las cosas mejor e intentando pagar todas sus deudas pendientes para volver a ser el mismo club que peleaba por la corona.
Luego de luchar al fondo de la tabla en las últimas dos temporadas, este 2020 el objetivo parece estar más claro para los rosados: volver a un torneo internacional. Así lo han manifestado los mismos jugadores del club, que no pierden la esperanza. De hecho, el equipo porteño ha tenido un arranque regular en la Liga 1 y se encontraba a mitad de la tabla antes que el fútbol frenara por el coronavirus.
–El sueño internacional frustado en 2003-
Uno de los momentos más gloriosos del Sport Boys en los últimos años fue en el 2003, cuando el entonces equipo dirigido por Jorge Sampaoli peleaba por conquistar su séptima estrella en el medio local. Además, el club chalaco volvería a competir en la Copa Libertadores, pero un hecho inédito frustró sus sueños.
Tras una gran campaña en aquel año, el Sport Boys luchó por el título nacional y por un cupo internacional. Sin embargo, a falta de seis fechas se suspendió el campeonato por la huelga de futbolistas que tuvo lugar por falta de pagos. La ‘Misilera’ acabó tercera en la tabla, lo que le daba el acceso a la Copa Libertadores, pero finalmente no fue así.
Para definir el cupo, la Federación de Fútbol organizó un cuadrangular que le daba opciones de clasificar hasta el séptimo lugar de la tabla(Cienciano). Sport Boys no estuvo de acuerdo con tal decisión y como medida de protesta no participó en el mini torneo, que concluyó con el pase del club cusqueño.
Nunca más el Sport Boys estuvo tan cerca de volver a un certamen internacional. Incluso, si participaba en dicho cuadrangular, en el que terminaron compitiendo solo tres equipos, los porteños pudieron clasificar a la Copa Sudamericana. Pero ni eso. Ese hecho aún se recuerda con cierto remordimiento en el Callao.
Sea como fuere, ser hincha del Sport Boys en los últimos años ha sido un gesto solo apto para valientes. En el Callao se ha vivido siempre al límite y aunque el barco estuvo a la deriva muchas veces, los porteños nunca abandonaron. Ahora, la ‘Misilera’ necesita recuperar ese pulso internacional para “ascender hasta el tope y luego al galope brillar en Berlín”, o en Argentina, o en Brasil, o donde el destino decida.