Fundación Euriodiomas presentó las instalaciones “Tierra incógnita” y “Autoreconocimiento”
Las instalaciones fueron desarrolladas por las artistas Romina Chuls y Natika Caballero.
La Fundación Euroidiomas presentó, ante un gran marco de espectadores, las instalaciones “Tierra Incógnita” y “Autoreconocimiento”, de Romina Chuls y Natika Caballero respectivamente.
“Tierra Incógnita” de Romina Chuls es una instalación hecha con diversos materiales, tales como cerámica, tela, papel, hilo y fotografías. Conversando con Romina, nos explicó que toda la obra está orientada hacia la expresión del encuentro del papel que cumplieron las mujeres en la historia familiar de Romina, ya que ella se dio cuenta de que todas las fotografías y todas las historias que ella conocía de su familia estaban vistas desde una escena varonil, dejando relegadas a las mujeres hacia un papel secundario. “En mi familia se repetían un tipo de historias, un tipo de mirada para contar las anécdotas y entendí que no sabía casi nada de las mujeres de la familia”. Es así como Romina decide iniciar una búsqueda en su árbol genealógico, una búsqueda que confirma las sospechas que ella tenía respecto a la opresión patriarcal hacia las mujeres en su familia. Romina, al darse cuenta que existían vacíos femeninos en su ascendencia, investigó a fondo el rol que cumplieron las mujeres de su familia tanto dentro de ella como en la sociedad. Buscando una forma de expresar el rol femenino en la historia, se encontró con el término “tierra incógnita”, que se emplea para describir un territorio no explorado, un territorio virgen, listo para investigar; término que para Romina representa a la obra.
Por otro lado se encuentra “Autoreconocimiento” de Natika Caballero, quien en una instalación de metal y cuerdas y, a través de una representación utilizando técnicas derivadas del Shibari, nos expresa la travesía que ella vivió desde el principio hasta el presente, donde ella ya no está sola ni triste en un camino tan difícil, sino acompañada y capaz de autoreconocerse. Es así como Natika nos comentó que va en búsqueda de reconocerse , de reconocer su cuerpo, “pero ya no lo hago sola, ya no lo hago aislada, sino con alguien más, por eso es necesario utilizar a dos personas en la representación”.
El público, que asistió en gran número a las presentaciones, quedó contento y conmovido luego de apreciar las obras de las jóvenes artistas. Un espectador nos comentó: “Me ha parecido muy intenso, me ha llegado a conmover bastante”, también indicó que ha sentido bastante la conexión entre las dos personas a la hora de hacer Shibari. “La verdad es que me siento bastante satisfecho por haber venido”. Otro espectador también indicó que se siente sorprendido de que sea gratis, “es una obra de primer nivel, está como para cobrar entrada, todo está muy bueno”.