A finales del siglo XIX en Estados Unidos se dio inicio a la denominada prensa amarillista, esta era la prensa que buscaba, más que calidad de información, repercusión e impacto en la población con sus publicaciones.
El término “amarillista” nace con la aparición de unas viñetas en las cuales aparecía The yellow kid[1] (El niño amarillo), el término es acentuado y finalmente empleado en 1898 en un artículo publicado por Erwin Wardman en el cual él hablaba de un periodismo indecente y dicho artículo tenía el título “We called them Yellow because they are Yellow”, esto por el juego de palabras que se da en inglés, puesto que yellow puede significar tanto amarillo como cruel; entonces, la traducción de dicho título sería “Nosotros los llamamos amarillos, porque ellos son crueles”[2]. Funcionando así la palabra “cruel” para describir el tipo de prensa que dos diarios importantes del momento, The New York World y The New York Journal, empezaron a usar por su constante rivalidad.
Joseph Pulitzer y William Randolph Hearst eran dos magnates del periodismo en Estados Unidos; quienes protagonizaron la guerra de la prensa amarilla, el primero era propietario de The New York World y el último de The New York Journal, ambos periódicos de gran relevancia y de gran influencia, no solo en la ciudad de New York, sino en todo Estados Unidos. La rivalidad de ambos personajes era evidente, puesto que sus diarios competían constantemente para obtener las mejores ventas de los ejemplares y ser el número uno.
Esta rivalidad surgió cuando un joven Hearst quiso hacerse de un nombre y con ese objetivo en la mira compró el diario Morning Journal, el cual renombraría posteriormente como The New York Journal, perteneciente a Albert Pulitzer, hermano de Joseph Pulitzer. Hearst desde el comienzo sabía que su mayor contrincante en este medio iba a ser Joseph Pulitzer y es por esto que sus estrategias iban dirigidas hacia su diario The New York World.
Al tiempo Hearst empieza a tomar posicionamiento y hacerse de un nombre, tal y como él lo esperaba; no obstante, ahora su objetivo era alcanzar el nivel de Pulitzer, es por esta razón que Hearst empezó a comprar a los editores y periodistas de The New York World y de la misma forma él comenzó a copiar el formato de este diario, pero Hearst decidió colocarle algo resaltante, su toque personal, y es así como dio arranque a los titulares amarillistas y sensacionalistas junto a grandes imágenes llamativas en la primera plana de The New York Journal.
Al poco tiempo que Hearst empezó a realizar estas “estrategias”, Pulitzer notó lo que este se proponía, por lo que no tardó en responder de la misma forma a las acciones tomadas de Hearst y es así como la guerra entre los diarios de gran posicionamiento en el momento, The New York World y The New York Journal, inicia.
La rivalidad entre ambos periódicos los llevó a apelar las sensaciones de los lectores, compitiendo por quién sacaba el título más amarillista o la imagen más impactantes en las primeras planas de sus diarios, es así como los diarios se llenaron de titulares llamativos, a veces crueles o incluso llegando a ser obscenos, igualmente sus portadas iban acompañadas de imágenes explícitas de accidentes, desastres o diversas situaciones que pudieran llamar la atención; más allá de informar con la verdad, buscaban ganar lectores, por lo cual inventaban conflictos, falsas noticias, e incluso, en el caso de William Randolph Hearst con The New York Journal, indujo a una guerra[3].
Otra de las “estrategias” que usaron fueron las páginas con caricaturas, que resultó siendo un éxito, puesto que entretenía a los más pequeños y los inmigrantes podían usar estas viñetas como guía básica de inglés; estas caricaturas iniciaron en 1983, súper coloridas y con escaso texto.
En el diario The New York World de Pulitzer se dio una serie de tiras muy exitosas, esta serie no tenía nombre y cada tira obtenía el nombre de lo más resaltante que ocurría en ella, estas se trataban de diversas aventuras por las cuales pasaban un grupo de juguetones niños. El dibujante y guionista de estas tiras caricaturescas era Richard Felton Outcault y fue él quien creó a The Yellow Kid, su primera aparición de este resaltante personaje no fue con su traje amarillo característico, sino con uno azul.
Esta caricatura llamó rápidamente la atención por su picardía y sus ocurrencias. La atención que recibió fue tan grande que un estratega Hearst pronto le ofreció una gran suma de dinero a Felton Outcualt para que dejara a Pulitzer y se pasara a The New York Journal, el dibujante y guionista aceptó y junto con él se llevó al popular personaje solo con la condición de que las viñetas recibieran el nombre de “The Yellow Kid” que era como ya conocían a la famosa caricatura. Es así como ahora The New York Journal tendría esta serie titulada “The Yellow Kid”.
Sin embargo, esto no pasaría desapercibido por Pulitzer, quien rápidamente contraría a otro dibujante y guionista llamado George Luks, el cual siguió dibujando al popular personaje en The New York World en la serie llamada “Hogan’s Alley”. De esta forma es como simultáneamente ambos periódicos tendrían al tan reconocido niño en sus páginas y este se volvería un símbolo para la prensa amarillista que Hearst y Pulitzer difundían.
Después de todos los esfuerzos que Hearst hizo para posicionarse en el mundo del periodismo, en 1896, luego de que The New York World tuviese que bajar el precio, un centavo, fue cuando Pulitzer reconoció la fuerza e influencia que tenía su contrincante. Sin embargo, ese suceso no detuvo a ninguno de los magnates en su rivalidad, por lo que los titulares sensacionalistas.
Bibliografía:
Barahona Gómez, F. (2016). Prensa sensacionalista americana en el s. XIX su contribución en la guerra hispano-estadounidense.
Bermeosolo, F. (1962). La opinión pública norteamericana y la guerra de los Estados Unidos contra España. Revista de estudios políticos, (123), 219-234.
Berti, F. (2010). Sensacionalismo y amarillismo en los medios de comunicación. Creación y producción en diseño y comunicación, 2(1), 43-45.
Mancha, J. J. (1998). 1898: prensa y opinión pública en España y los Estados Unidos. Revista de Comunicación de la SEECI, 45-56.
Milton, J. (2014). The Yellow Kids: Foreign Correspondents in the Heyday of Yellow Journalism. Open Road Media.
[1] The Yellow Kid era un niño vestido de amarillo que apareció por primera vez en una tira cómica en el diario estadounidense The New York World.
[2] Otra traducción podría ser “Nosotros les decimos amarillos, porque ellos son cobardes”.
[3] Guerra hispana-estadounidense que estalló en 1989.