Dic. 01, 2021 a las 9:35 am

Un problema sin resolver: Comercio ilegal de animales en Lima

GIANELLA QUESADA AZANAHace 2 años1 diciembre, 2021Comercio ilegal Fauna Lima hiperlocal

La compra y venta ilícita de animales es el cuarto mayor comercio ilegal a nivel mundial, según Patricia Torres, abogada de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA). Al respecto, el Perú, debido a su biodiversidad, es uno de los principales países donde se desarrolla el tráfico ilegal de animales a nivel nacional y transnacional. El regidor metropolitano, Carlo Ángeles, indicó que las mafias aprovechan la insuficiente coordinación institucional y los tediosos procesos burocráticos para lucrar con la vida de los animales.

En ese sentido, el centro de Lima, específicamente, los jirones Ayacucho y Puno, se han convertido en los núcleos de comercio ilegal de fauna doméstica y silvestre. Y aunque, estos negocios han tenido que cerrar debido a la crisis sanitaria, los métodos de compra y venta ilegal se han adaptado, dando origen al comercio virtual de animales, lo cual complejiza el proceso de detención de los vendedores y compradores.

Según la Municipalidad de Lima, durante el año 2021, se han rescatado 153 animales, que fueron decomisados a personas que los ofrecían en la vía pública, así como en quintas, donde los tenían hacinados en jaulas y cajas en mal estado. En relación a ello, el veterinario Francisco Cavero comentó, en su blog, que los afectados no son solo los animales que logran ser vendidos; en ese sentido, plantea un ejemplo y menciona que “por cada mono vendido, otros nueve han muerto en el tránsito desde su hábitat natural hasta los lugares de comercialización. Y, como generalmente son recién nacidos sacrifican a las madres”. Este comercio ilícito no solo afecta a los animales, sino también, a la población humana, la cual puede sufrir problemas de salud al estar expuesta a enfermedades que transmiten los animales silvestres.

Frente a ello, el Gobierno peruano invita a la población a denunciar la venta ilegal de animales. Por lo tanto, la denuncia de la venta de animales domésticos o de granja, se puede realizar en la comisaría del sector en donde se desarrolla la irregularidad, o se puede llamar a la Municipalidad de Lima a través de los teléfonos (01) 632-1343 o 982 158 461; asimismo, se puede enviar un correo a denuncias.gfc@munlima.gob.pe.

Por otro lado, la denuncia de la venta de animales silvestres, se puede efectuar comunicándose con la Dirección de Medioambiente de la Policía Nacional del Perú, a través del teléfono 964809122 o enviando un mensaje a los siguientes correos: dirmeamb.divctiprn@policia.gob.pe; dirin.sipol.dirmeamb@policia.gob.pe. De igual manera, se puede acudir a la sede del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), ubicado en la Avenida Javier Prado Oeste N° 2442, en la urbanización Orrantia, Magdalena del Mar, Lima. También, se puede denunciar llamando al 01 225 9005 o accediendo a su página web, a través del siguiente link: http://appweb.serfor.gob.pe/alertaserfor/.

Además, es importante considerar que antes de realizar la denuncia, se deben de conseguir pruebas, las cuales pueden ser fotos o vídeos. Asimismo, es necesario identificar al denunciado y el lugar donde realiza la venta ilegal. Por otro lado, para denunciar la compra y venta virtual de animales, se debe de presentar la dirección URL de la página web. La denuncia puede ser con reserva de identidad, sin reserva de identidad o anónima, ello depende del denunciante.

El artículo 308, de la Ley de delitos ambientales, sanciona con pena privativa de libertad de 3 a 5 años a quienes estén involucrados en la comercialización no autorizada de recursos genéticos de especies de flora y fauna silvestre. De igual manera, la Municipalidad de Lima, fundamentándose en la Ordenanza N° 2200, sanciona con 1 UIT (s/. 4400) por comercializar cualquier espécimen de fauna silvestre o animal doméstico en área de uso público o locales no autorizados. Asimismo, la pena por maltrato animal es de 3 años, pero si trae como consecuencia la muerte, puede ser de hasta 5 años.