El pasado 25 de noviembre se celebró el Día Internacional por la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Alrededor del mundo, miles de mujeres salieron a marchar en defensa de sus derechos. Perú no fue la excepción, diversos grupos activistas se concentraron en diferentes partes del país para expresar este sentir colectivo.
En Lima, se realizó una gran concentración en la histórica Plaza San Martín, que hasta hace unos días era refugio de los protestantes contra la situación política del país. Fue ahí donde las activistas alzaron sus voces porque, como mencionó Alessandra Denegri para El Comercio en una ocasión, “ser mujer en el Perú no es fácil”.
Un país como el nuestro, donde las brechas de género se visibilizan en cada ámbito en el cual una mujer busca desenvolverse, donde el machismo se asoma en cada esquina y susurra, muchas veces grita, criticando la ropa que vistes, las actividades que realizas, la hora que sales, las copas que bebes. Donde los policías, personal preparado y destinado al cuidado de la población, tratan de justificar los actos de los inculpados y pasar la culpa a la figura femenina, y en otros casos, también causan estos abusos.
Se pide un alto a la ola de feminicidios que viene azotando nuestro país desde hace mucho. Es por todo ello que a pesar de la situación sanitaria que se vive, mujeres en todo el mundo ha vuelto a las calles, movilizándose con la finalidad de cambiar, para mejor, el futuro de millones de niñas, adolescentes y mujeres.
Considero que ser mujer en el Perú no solamente es difícil, sino, en ocasiones, doloroso. Duele cuando las noticias se enfocan en presentar información banal, que mencionar a las miles de mujeres víctimas de violencia de género en el país. Se necesita hacer justicia en honor a las fallecidas y generar consciencia social, no escuchar en todos los noticieros sobre los nuevos rumores de la farándula.
Estas luchas, comenzaron mucho antes de la celebración de este día, y no se realizan solo el 8 de marzo y el 25 de noviembre. Esta lucha se da diariamente, cuando salimos a las calles, cuando decidimos continuar nuestros estudios, cuando decidimos ir en contra de la opresión. Como menciona el poeta Miguel Gane, “No, calladita no estás más guapa. Tú eres preciosa cuando luchas, cuando peleas por lo tuyo, cuando no te callas”.
Días como el 25 de noviembre nos hacen reflexionar sobre la situación actual de la mujer en el Perú y los muchos cambios que nos faltan para hacer del Perú un país digno para vivir en paz. Recordemos, que en estas marchas se discuten temas como el enfoque de género, la legalidad del aborto, entre otros.
En conclusión, la lucha contra la violencia de género es un tema que debe seguirse reforzando, para erradicar estos actos que maltratan a las mujeres y, sobre todo, inculcar una cultura de respeto. Finalmente, resumimos esta reflexión con un fragmento del famoso poema de César Vallejo: “Hay hermanos, muchísimo por hacer”.
